¿Alguna vez han podido tener la mente totalmente en blanco?
Es casi imposible ¿verdad?
Pero es que pensar es algo natural, instintivo. No basta con todo lo que traemos en la cabeza cómo recuerdos y pendientes, sino todo lo que está aconteciendo en el momento detona un pensamiento. El sonido, lo que estamos viendo, los olores, vaya, hasta el hambre nos hace pensar en lo que comeremos.
¿Cómo se supone que podamos quedarnos en un estado “inerte” sin pensamientos?
¿Acaso es posible?
Sólo me imagino dos situaciones en las que he estado en las que casi podría decir que no estoy pensando.
- ¿Han oído de la vacuidad?
He tocado este tema con anterioridad cuando hablaba de lo que en realidad pienso que podríamos ser. Si quitas todas las capas que ha creado nuestro ego al darnos una identidad al final queda una materia que me imagino es la vacuidad, una esencia con potencial de convertirse en muchas cosas.
¿Me siguen?
El budismo toca con recurrencia este tema, y de hecho hay muchas meditaciones que su objetivo es entrar en la vacuidad, o ser la vacuidad.
Básicamente lo que hacen estas meditaciones es guiarte para que te deshagas del pensamiento de tu cuerpo físico poco a poco. Si sigues las instrucciones al final tendrás una experiencia… algo rara. Probablemente hasta te llegue a dar miedo, y es que puedes llegar a un estado alterado de la consciencia, en el cual no percibes el mundo físico a través de tus sentidos, como normalmente estamos acostumbrados a hacerlo.
Es un estado en el que te sientes vivo, pero no a través de un cuerpo, sino a través de la mente. Pues creo que en ese estado en el que nos hemos olvidado no sólo de nuestro cuerpo, sino de todos los pensamientos que traíamos rondando nuestra cabeza, es lo más cercano a no pensar en nada.
¿Quieren intentarlo?
Acá les dejo el link para que tengan su propia opinión acerca de la experiencia: https://www.youtube.com/watch?v=Sae22TheyKM
2. ¿Conocen el estado de Flow?
El término es un poco nuevo, se supone que es un estado en el que entras cuando todo fluye. Por ejemplo cuando estás tan concentrado en una actividad que te olvidas de todo lo demás, y no sólo eso, sino que el siguiente movimiento que harás se siente instintivo.
Puedes entrar en flow haciendo casi cualquier actividad, aunque algunos lo entienden mejor para los deportes y las artes.
En mi caso lo experimento a veces cuando dibujo. Es una sensación relajante y placentera, no pienso en algo en específico cuando sucede, sólo tengo en mente el siguiente trazo que es como si ya estuviera ahí y yo sólo tuviera que pasar el grafito para marcarlo.
Hasta aquí la historia de hoy. Si les gustó el texto compártanselo a alguien a quien le pueda interesar.
Por cierto, no me considero budista y cuando hablo de la vacuidad es desde mi perspectiva.
¡Gracias por leerme!
